Cuando empiezas a ejercitarte sientes motivación, energía y quieras sacar la cantidad de sudor que sea necesaria para cumplir con tu meta del día. Pero… ¿Sabes lo importante que es reponer todo ese líquido que pierde tu cuerpo? Si la respuesta es sí, excelente, seguramente te estás hidratando como debe ser; si tu respuesta es negativa, no te preocupes, llegaste al lugar indicado. Sigue leyendo y entérate de por qué es tan importante que te hidrates correctamente.

El 60% de nuestro cuerpo está compuesto de agua, y aunque este porcentaje varía de acuerdo con la etapa de la vida en la que nos encontremos, su función no deja de ser esencial para los procesos de nuestro metabolismo. Esto tiene que ver con el transporte de oxígeno, glucosas y grasas, entre otras cosas que te permitirán mantenerte saludable. Es por esto que cuando haces actividad física y te mantienes activo es importante que estés hidratado antes, durante y después del ejercicio.

¿Cuál es la forma correcta de mantenerte hidratado antes de hacer ejercicio?

Antes de colocarte en movimiento tu cuerpo tiene que estar listo. Es por ello que la recomendación es tomar entre 2 y 3 vasos de agua por lo menos 4 horas antes de la actividad física.

¿Durante el ejercicio?

Si sientes fatiga cuando haces ejercicio puede ser debido a que no estás lo suficientemente hidratado. Para evitar esto debes tomar agua para mantener a tu cuerpo funcionando correctamente a pesar de la actividad física. En Shadox lo recomendable es tomar sorbos cortos en el intermedio que se hace para tal fin. Si hay mucha fatiga se pueden tomar sorbos pequeños durante la clase.

Ya terminé, ¿debo seguir hidratándome?

Sí. Después de practicar cualquier Shadox o cualquier otra actividad física es primordial que repongas tus líquidos y te asegures de recuperar cualquier déficit de fluidos. Lo ideal sería que tomes 50% más de los líquidos que perdiste en el sudor durante las siguientes 4 o 6 horas.

Es importante que hidratarte se convierta en un hábito y que recuerdes que la cantidad de líquido que necesitas puede variar, pues la sudoración depende de aspectos como el clima, el peso, el nivel de la actividad que hagas y tu condición física. Cuando no repones el líquido que perdiste puedes llegar a un estado de deshidratación que podría causarte efectos secundarios como un golpe de calor o calambres.

Por último te recomendamos llevar una adecuada ingesta de líquido porque con ella se:

-Promueve que las enzimas se activen permitiendo la liberación de energía proveniente de los nutrientes.

-Lubrica y se le da soporte estructural a los tejidos y articulaciones.

-Lleva a cabo el transporte de nutrientes, vitaminas y minerales.

-Favorece la eliminación de sustancias tóxicas e impurezas del organismo.

Ahora ya lo sabes. Mantenerte hidratado es sinónimo de salud. Combina esta práctica con el ejercicio que quieras y estarás contribuyendo con tu bienestar.